Cómo la tecnología de los códigos de barras ha evolucionado desde un paquete de chicles hasta el compromiso total con el consumidor
La tecnología de los códigos de barras ha sido un éxito masivo desde su introducción en el espacio minorista en 1974, cuando un paquete de chicles Wrigley's se convirtió en el primer artículo comercial escaneado mediante un código de barras. Desde entonces, los códigos de barras se han convertido en algo verdaderamente universal. Desde la agilización del punto de venta y la caja móvil, el seguimiento de los paquetes a través del proceso de entrega, la verificación de la identidad de los pacientes en un hospital, hasta proporcionar instrucciones de desembalaje e instalación para los nuevos dispositivos electrónicos, existe una demanda de tecnología de códigos de barras en casi todas las industrias. A lo largo de los años, los avances en la tecnología de los códigos de barras han ampliado sus capacidades.
Décadas de ampliación de las capacidades de los códigos de barras
Los primeros códigos de barras podían almacenar doce dígitos de información numérica. No es de extrañar que, a medida que la capacidad del código de barras para agilizar las operaciones comerciales se hacía más evidente, aumentaran las demandas para compartir más datos en un solo código de barras.
Los escáneres láser lineales que antes utilizaban las empresas solo podían leer los códigos de barras en una orientación. Esto significaba que, a medida que aumentaba la cantidad de datos en el código de barras, éste se hacía más largo. Había un límite para la longitud de un código de barras antes de que se quedara sin espacio en una etiqueta. Aunque los códigos de barras GS1-128 ampliaron la tecnología de los códigos de barras 1D al permitir múltiples campos, la capacidad total seguía estando limitada a 48 caracteres con restricciones de longitud. Para ampliar la capacidad de los códigos de barras más allá de este límite, era necesario apilar los códigos de barras 1D, como los DataBar, unos encima de otros, pero la capacidad total seguía estando limitada a 74 caracteres.
El uso de cámaras en lugar de láseres para la captura de códigos de barras ha permitido escanearlos en cualquier orientación y ha hecho posible que los códigos de barras adquieran una nueva dimensión. En 1987 se introdujeron los códigos de barras 2D con capacidad para almacenar varios cientos de caracteres. Otras mejoras han ampliado las capacidades de los códigos de barras 2D a un poco más de 7,000 caracteres.
Cómo los códigos QR han creado un vínculo directo entre el fabricante y el usuario final
Uno de los avances más recientes en la tecnología de los códigos de barras son los códigos de respuesta rápida (QR). Un código QR puede contener una cadena de varios miles de caracteres. Un uso común de los códigos QR es apuntar con el teléfono a un código QR y hacer que un navegador web vaya al enlace del sitio web contenido en el código QR. Este enlace podría llevar al usuario a la información del producto, a las instrucciones de instalación, a inscribirse para recibir un descuento, a llenar una encuesta o a obtener información adicional sobre la empresa. Añadir un código QR a la etiqueta de un producto proporciona un enlace directo entre un fabricante y un consumidor. Los fabricantes pueden aprovechar esta tecnología para obtener información sobre quiénes han comprado o expresado su interés en sus productos, y el consumidor dispone de canales directos para aportar o informar. Una empresa podría poner sus políticas de sostenibilidad en un código QR que un consumidor podría escanear en la etiqueta. Un código QR podría incluso enlazar al usuario con un vídeo del proceso de instalación de su nueva compra. La capacidad de codificar y conectar directamente a un consumidor y a un fabricante abre muchas nuevas oportunidades.
Escanee el siguiente código QR con su teléfono inteligente para ver cómo funciona la tecnología.
Por qué la inspección de los códigos de barras es fundamental para aumentar la capacidad de estos
Los códigos de barras han recorrido un largo camino desde su primer uso comercial hace cuarenta y siete años, con una capacidad casi mil veces mayor. Con esta mayor capacidad y densidad de datos, hay un mayor nivel de impacto y posibilidad de un fallo de lectura si no se cuenta con un sistema de inspección de códigos de barras adecuado. Los códigos de barras pueden comunicar una enorme cantidad de datos, pero esa información es inútil e incluso puede costarle dinero al fabricante si el código de barras es ilegible. La inspección de las etiquetas es crucial para garantizar la información correcta, evitar las devoluciones de productos, evitar las multas en los sectores regulados y fidelizar a los clientes.
Nuestra tecnología de inspección de códigos de barras ODV-2D en las galardonadas impresoras empresariales T6000e y T8000 tiene la capacidad de encontrar, leer y calificar cada etiqueta de código de barras a medida que se imprime. La tecnología utiliza las normas ISO para dar una letra y una puntuación numérica a cada código de barras. La calificación incluye detalles de la norma ISO, el tipo de código de barras y los datos del código de barras. Se captura una imagen para cada etiqueta y está disponible para ser archivada y utilizada por la aplicación anfitriona.
La elaboración de informes y el registro de cada etiqueta ayuda a las organizaciones a defenderse de las tasas de devolución y las sanciones por códigos de barras ilegibles o incorrectos. Para los fabricantes que codifican sus códigos de barras con grandes cantidades de información, esta tecnología puede ayudar a prevenir y defenderse de grandes cantidades de tiempo para proyectos de reetiquetado y de decenas de miles de dólares en posibles multas por códigos de barras erróneos.
Para obtener más información sobre la inspección de códigos de barras, haga clic aquí o póngase en contacto con su representante local de ventas de TSC Printronix Auto ID.
